La Pasión NO es apta para MULTITUDES!

Todos los días aprendemos algo, todos los días nuestros ojos se abren ávidos de magia, todos los día agradecemos por hacer lo que nos gusta…

¿Es así? ¿Todos los días das las gracias por poder disfrutar de hacer aquello que te apasiona?

Hace un par de días en la sala de espera de mi dentista descubrí un pequeño cartel que colgaba tímidamente en una de las paredes y me hizo reflexionar sobre ciertas cosas.

Me quedé largo rato releyendo la frase, hasta que realmente entendí porque algunas personas son infelices con o en sus trabajos.

Tuve claro porque cada fin de semana escucho a alguien decir “que castigo, otra vez lunes”, porque existen las “bajas laborales”, que la rutina agota y anula la creatividad y también porque la secretaría de mi dentista nunca se maquilla una sonrisa.

La frase decía algo así como “Trabajar duro en algo que no te interesa se llama stress. Trabajar duro en algo que realmente amas se llama PASIÓN”  Wow, fabuloso!

Hice un esfuerzo para revivir  aquella antigua sensación de mis días sin pasión.

**INFORMACION DE TUMAKEUP: Ingresa aquí y conoce como iniciar Tu carrera como Maquilladora Profesional Haz Clic Aquí e Inicia tu profesión de Maquilladora

Recordé lo angustiante que había sido tener que decirle a mis padres que dejaba la facultad de medicina, recordé también mi estresante trabajo como secretaria (ojo, no tengo nada en contra de ellas, pero no era lo que a mi me llenaba) durante algunos años y mis errantes intentos de seguir una carrera universitaria sin estar del todo convencida.

Reviví solo por un momento la mañana en que desperté llorando porque ya no quería trabajar como administrativa.

Pensé: ¿cómo pude soportar tanto dolor? Sí, dolor, realmente me dolía no encontrar algo que me llenara, me dolía sentir que el tiempo se agotaba y que tal vez estaba desperdiciando los mejores años de mi vida, conformando a todos menos a mí.

Hasta que un gran día por pura casualidad me choque de frente con mi pasión. Me dio una bofetada en toda la cara, me sacudió por completo, me despertó y me grito a viva voz: “aquí estoy, que harás, me darás la espalda?”

Confieso que estuve a punto de salir corriendo, de decir “esto no es para mí” y poner mil excusas, estuve a punto de agarrarme firme al argumento de quienes me decían de forma burlona: “maquilladora…y eso se estudia?”  

Aún tengo las palabras de mi hermano grabadas en mi disco rígido: “el día que te aburras de eso que haces y quieras un trabajo normal cuenta conmigo, en la empresa siempre se necesita a alguien más”.

Hoy le agradezco a mi PASIÓN por haberme dado esa cachetada, agradezco el momento en que decidí “TOMAR ACCIÓN” y convertirme en maquilladora pese a los pronóstico desalentadores que recibía.

Agradezco el día en que dejé mi trabajo de oficina “la rutina, el salario asegurado, mi pequeña y estresante vida resuelta” agradezco cada caída, porque eso me hizo más fuerte y más consciente de quién era y hacia donde quería ir.

De cara al futuro, veo nuevos desafíos, nuevas metas, nuevos logros, éxitos, y felicidad, la felicidad que solo puede darme el hacer lo que me gusta.  Me siento afortunada de ser parte del porcentaje de personas que aman lo que hacen, de vivir de mi pasión por el maquillaje, de ser MAQUILLADORA!

Ahora es tu turno, ¿te animas a dar el primero paso? ¿Quieres ser una MAQUILLADORA Profesional y trabajar  en lo que realmente amas?

Pregúntate: ¿Qué es aquello que harías con el mayor de los gustos, sin sentir stress, presión o cansancio?, Si tu respuesta es «MAQUILLAR» entonces ya sabes lo que tienes que hacer!

Depende única y exclusivamente de ti.

¿Qué opinas?

Deja tu comentario aquí debajo!